El ex presidente dejó este miércoles el sanatorio Otamendi y se dirigió a su quinta Los Abrojos, en el partido bonaerense de Malvinas Argentinas.
Mauricio Macri recibió el alta médica este miércoles luego de ser sometido a una operación en la que le extirparon un tumor benigno del intestino grueso y tendrá que esperar tres días para volver a la actividad plena, incluido la física.
El ex presidente se retiró del sanatorio Otamendi, en la Ciudad de Buenos Aires, minutos antes de las 12 y se dirigió a su casa a en Los Abrojos, en el partido bonaerense de Malvinas Argentinas. Allí el presidente pasa sus días desde el 3 de este mes, cuando regresó al país tras una estadía de poco más de un mes en Francia y Suiza.
Macri fue operado en la tarde del martes por un tumor benigno en el intestino grueso, en una intervención que comenzó a las 16 y se extendió por casi dos horas.
“Su estado de salud es muy bueno”, señaló Pedro Ferraina, médico del ex Jefe del Estado, poco después de la intervención, y más tarde fue el propio Macri quien dejó un mensaje a través de las redes sociales: “Gracias al sanatorio y al equipo médico que me acompañó hoy durante mi intervención. Gracias también a todos por sus buenos deseos y cariño. Estoy muy bien, recuperándome”.
Ferraina precisó que la intervención de Macri “fue en el intestino grueso, exactamente en el ciego, lo que se denomina adenoma médicamente, que ya había sido biopsiada previamente y era benigna, pero por su conformación y su ubicación hacían muy dificil sacarla por via endoscópica. Estábamos preparados para la eventualidad de una cirugía laparoscópica”.
“Ese pólipo fue diagnosticado en un estudio de rutina, que él se suele hacer por colonoscopía, donde se diagnosticó esa lesión. En este caso la conformación era plana, estaba ubicado en una situación muy dificil para su extracción pero se pudo quitar”, agregó.